El kirchnerismo y los qom (Morgado, desilusión y después...)

Un kirchnerista desencantado, en un canal kirchnerista, entrevistado por un facho kirchnerista, desnuda la hipocresía del kirchnerismo sobre derechos humanos, racismo, discriminación y represión a los pueblos originarios.
Ahora falta que aparezcan los sapitos k a decirle a Morgado que es amigo de Clarín y las corporaciones...
Se recomienda ir directo al minuto 34:50, donde cuenta por qué el gobierno de Cristina lo rajó del INADI...

Ya habíamos leído a Morgado hace algunas semanas relatando lo mismo en una entrevista que le hizo Susana Salina para el sitio Furias ("Claudio Morgado rompe el silencio", acá). Se recomienda esa lectura para ampliar el conocimiento sobre el rol nefasto que desempeñó en toda esta historia el menemista-duhaldista-kirchnerista polifunción Aníbal Fernández. El mismo al que no hace mucho un par de Madres de Plaza de Mayo kirchneristas (Hebe de Bonafini y sus compañeras estrechas) le entregaron un pañuelo blanco por considerarlo un "compañero jugado, honesto y buen político".


Es cierto que el doble discurso del gobierno alrededor de los derechos humanos hace rato se desnudó, al calor de hechos incostrastables frente a los que los funcionarios nacionales como provinciales demostraron ser campeones del cinismo, la hipocresía y la voluntad de encubrimiento a los represores, asesinos y desaparecedores del presente. Allí están los casos de Julio López , Luciano Arruga, Daniel Solano, Marita Verón; los asesinatos en el Parque Indoamericano y en Ledesma -Jujuy-; las condenas a los inocentes trabajadores petroleros de Las Heras; el Proyecto X y los más de 5.000 luchadores populares procesados. En todos ellos la participación directa o indirecta del gobierno nacional y sus socios gobernadores para encubrir a los responsables y asegurar la impunidad es un sello distintivo.

Pero pocas veces leemos o escuchamos directamente a los propios kirchneristas relatar sus experiencias "traumáticas". Claudio Morgado lo hace, quizás por honestidad intelectual, quizás para no quedar pegado negativamente por su paso en la gestión de un gobierno en retirada. Sea como sea, nos sirve. No para descubrir nada nuevo, sino para reafirmar lo que venimos diciendo muchos desde hace tiempo. En este caso sobre un tema más que sensible, como lo es la violación sistemática de todos los derechos de los hermanos de los pueblos originarios por parte de los capitalistas del campo y la ciudad en sociedad con el personal político de turno que gerencia el Estado en todos sus niveles, se vista del ropaje que se vista.